El asesinato de José Antonio Pardines Arcay se produjo en la Nacional I, a su paso por el término municipal de Villabona (Guipúzcoa), en una zona en obras de la carretera. La Guardia Civil de Tráfico se encontraba en el lugar desviando los vehículos y dirigiendo el tráfico. Pardines estaba en un extremo de las obras y Félix de Diego Martínez, su compañero, en el otro, a una distancia de dos kilómetros.

En ese momento los etarras Francisco Javier Echebarrieta Ortiz, alias Txabi, e Iñaki Sarasketa, que viajaban en un automóvil Seat 850 coupé con matrícula de Zaragoza, se detuvieron junto a Pardines, que debió ver algo sospechoso en el mismo y les solicitó la documentación.

El etarra Javier Etxebarrieta le disparó en la cabeza y en el pecho cuando el agente detuvo su vehículo en el control rutinario. El etarra volvió a dispararle tres o cuatro tiros más en el pecho ya que la víctima cayó boca arriba. El otro guardia civil, Félix de Diego, fue alertado por un camionero y se acercó al lugar de los hechos, pero encontró a su compañero ya fallecido en medio de un charco de sangre.

Este fue el primer asesinato de ETA. El compañero de Pardines, Félix de Diego Martínez, también fue asesinado en 1979 a manos de ETA.